
ayer por la tarde-noche recibí unas lecciones de valores que me hicieron sentir como una vil cucaracha o lo peor de lo que su imainacion sea capas de concebir. Me enseñaron con el ejemplo lo que es tener PALABRA, y cumplirla aunque alla que cortarse uno sin decir ni pío. Me enseñaron también que las personas son libres de hacer lo que les plazca y que nadie obliga a nadie a hacer algo que no quieran, que el estar junto a una persona no debe ser por deber o por compromiso sino por placer y que el verdadero sentimiento de amor hace a todo lo demás pequeño.